Los panderos son galletas de almidón dulce. De origen vallecaucano, mi abuela, nativa del Tolima, los preparaba riquísimos. Los volví a ver después de muchos años en las carreteras del Viejo Caldas y el Valle.
Precaliente el horno a 375º F. Coloque el almidón, azúcar, panela, polvo de hornear, y sal en el procesador de alimentos y mezcle 10 segundos. Agregue el huevo, aguardiente y manteca y mezcle 2 minutos.
Retire la masa del procesador y viértala en el mesón de trabajo, espolvoreado con más almidón dulce. La masa se verá muy brillante, y si le cuesta trabajo amasarla para darle forma, agregue 1 cucharada más de almidón, allí mismo con la mano.
Voltee 2 o 3 veces la masa hasta que obtenga una forma de rollo. Córtelo en 4 y amase de nuevo cada pedazo para obtener rollos de 3 cm. de grosor. Corte cada rollo en porciones de 3 cm. y obtendrá unas 10 de cada rollo. Con un tenedor, marque cada galleta por encima para que se vea hundida.
Engrase un molde de hornear y arregle los panderos separados uno del otro. Hornee 15 minutos, o hasta que estén levemente dorados por debajo, pero pálidos por encima.
Enfríe y guarde en latas selladas.