Los cocos vienen en diferentes tamaños. Cuando vayas a comprar uno, primero mira los tres agujeros en la parte superior para ver que no se ven marrón, mohoso o abierto, y huela para asegurarse de que huelen frescos y no rancios. Segundo, agita el coco. Deberías poder escuchar que tiene mucha agua adentro.
Para eliminar el agua del coco: Perforar uno de los tres agujeros en la parte superior del coco con un palo puntiagudo o una pica de hielo limpio. Uno de ellos pinchará fácilmente. Voltee hacia abajo y vierta el agua del interior del coco en una taza. Dejar de lado.
Para abrir y quitar la carne de un coco: Coloque todo el coco en un horno a 400ºF durante 3 minutos. Retire del horno; golpear duro con un martillo para romperlo. Con la punta de un cuchillo, saque la carne de coco. Pele la piel marrón de la carne solo si la receta así lo requiere. En el caso de la leche de coco, no es necesario; en el caso de Cocadas Blancas lo es.
Ralle el coco; deberá obtener unas 3 y 1/2 a 4 tazas. Coloque la mitad en una licuadora con sificiente agua de coco para licuar. Licue 1 minuto. Coloque un trapo limpio sonbre un colador y vierta aquí el licuado. Exprima el trapo bien para extraer toda la leche del coco. Repita con el resto del coco y con el agua tibia si no le alcanza la leche. Si necesita más leche de la que le ha salido, vuelva el coco licuado a la licuadora con más agua y repita el procedimiento. Deberá obtener unas 4 tazas de leche de coco.
Nota: La leche de coco se rancia fácilmente, así que si tiene mucha guardela en el congelador.