Ponga azúcar y agua en una olla pequeña. Deje hervir, disuelva el azúcar, apague el fogón y retire para enfriar. Cuando esté lo suficientemente frío, lleve la mezcla a la licuadora.
Licúe el jarabe, la leche, la crema, las yemas y la sal. Ponga todo en una olla de fondo pesado y cocine a fuego medio hasta que la mezcla espese, durante 7 minutos, aproximadamente. Retire de la olla y agregue el café y la vainilla, mezcle.
Transfiera a la máquina de helados y procese hasta que obtenga una consistencia cremosa y espesa.
Añada los trozos de macadamias cubiertas de chocolate y lleve todo al congelador hasta alcanzar la dureza deseada. Para obtener una mejor consistencia, puede congelar desde la noche anterior.
Sirva.
Nota: si no tiene máquina de hacer helados, meta el batido del helado al congelador y retírelo cuando esté semicongelado. Vuelva a batirlo en ese estado y métalo de nuevo al congelador. Así evitará la formación de cristales.